NATURALEZA
Existe un valle donde la vida va a otro ritmo y los colores de las estaciones marcan el paso del tiempo. Este valle lo baña un río pequeño y juguetón, el Corb, y lo ventila un viento que viene de lejos, la marea. En sus tierras, domesticadas por el hombre desde hace tiempo, crecen almendros, olivos, viñas y cereales. En los márgenes las amapolas, el tomillo y la artemisa. Bosques de encina, roble y pino completan el tapiz. La historia la cuentan las paredes de piedra seca, torres, cabañas, viejos molinos, iglesias y castillos. Para descubrir del todo este valle es imprescindible pasear, curiosear, disfrutar.
El Valle del Corb comprende los pueblos y municipios del Urgell, la Segarra y la Conca de Barberà. Los une un mismo río, el Corb, que dibuja las sinuosas curvas entre sembrados, viñas, almendros y paisajes que conservan el encanto y la belleza de la naturaleza en estado puro. En el Valle del Corb se respira paz, quietud... Te esperamos.
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